Los primeros rayos de sol se colaban por la ventana terminando en el rostro de ella. Él, a su lado, la miraba soñoliento mientras pensaba en su belleza mientras duerme. El sonido constante del estrés urbano hizo que ella se despertara y al abrir sus grandes ojos marrones encontrarse a escasos centímetros su rostro.
+ ¿ te he dicho alguna vez lo preciosa que estás mientras duermes?
- No me gusta que me mires, pierdes el tiempo
+ Claro que no, es fantástico observarte, ver que sonríes porque estás soñando conmigo. Y mientras tanto desear poder repetir esto todos los días. Quiero verte a mi lado cada mañana, quiero que mi primera imagen sea tu angelical rostro dormido.
Y así, ella descubrió que no sabía que era aún mas bonito: sus sueños o esta realidad a su lado. Porque él hacía de la vida una aventura.  Es estar dispuesta a todo a su lado, prepararte para las sorpresas. Hoy podrías ser la protagonista de la película más romántica existente, pero quizás mañana te tocase hacerle sonreír o animarle. Un día podría proponerte ir los dos al lugar más lejos del mundo. Solos. En cambio al siguiente, tan solo te queda esperar.
Pero amar es esto ¿no?. Estar dispuesta a cualquier cosa, arriesgarte y ganar. Amar se trata de emprender un viaje, a cualquier lugar, con la compañía que elijas.
Y a mí me encanta viajar. Contigo. Y cuanto más lejos, mejor.