lunes, 20 de junio de 2011

Hay días iluminados por pequeñas cosas, por nimiedades que te hacen increíblemente feliz: una sobremesa con risas, un juguete de la infancia que aparece en el fondo de la estantería, una mano que aprieta la tuya, una llamada que no esperabas, una visita sorpresa, unas palabras dulces, un regalo con mucho valor sentimental, una voz familiar que hacia tiempo que no escuchabas...
Hay días iluminados por pequeños momentos de gracia, un aroma que te alegra el alma, un rayo de sol que entra por la ventana, la llegada del verano y el cambio de tiempo.
Hay días hechos de nimiedades, días de los que uno se acuerda durante mucho tiempo sin que pueda verdaderamente saber por qué.
Pero hoy, no es uno de esos días...

2 comentarios:

  1. Me pase por casualidad y al llegar a tu blog me encanto, me gusto muchísimo también, esta entrada:)
    Si puedes pásate por mi blog
    http://unasolapersona.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. Oh muchas gracias :D
    Claro que me pasaré. Un besito^^

    ResponderEliminar